Uno de estos días

Uno de estos días voy a volver a escribir en este, mi blog sobre la Unión Española.

Sigo yendo a Santa Laura, sigo comiendo mi mechada de cábala, sigo llevando a mi hijo cada vez que puedo (y que quiere) para inocularle el bichito hispano... en fin, sigo gritando y sufriendo y celebrando según nos depare el menú. Pero es extraño, incluso para mí, que me cueste tanto volver a poner los dedos en el teclado para compartir ideas y sentimientos a través de este blog.

Es más extraño aun que este período de sequía coincida con los años en que Unión Española está bajo el mando técnico de José Luis Sierra, el ídolo con el que he crecido como hincha hispano y como fanático futbolero, el símbolo -al menos para mí- de un fútbol que lentamente se va desvaneciendo (no hablo sólo de estilos o formas de vivir el juego) y nos deja así como en descampado, a la deriva...

¿Será eso? ¿Será que el fútbol con el que crecí está desapareciendo? No lo sé. ¿Será que el mundo entero es una gran melcocha en la que cuesta entender el fútbol como algo que vaya más allá de un buen espectáculo, de una más de las ofertas del mundo del enterteinment? Quizás. ¿Será que decir un par de cosas en Twitter bastan ahora para satisfacer mi ímpetu de columnista? ¿Será que me alcanza con publicar alguna foto en las redes sociales? No lo sé. No creo. Por eso digo que uno de estos días voy a volver a escribir en este blog.

No digo que no he estado tentado de retomar el hábito de escribir el blog, pero... así son las cosas, qué se le va a hacer.

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Por suerte hay sangre joven hoy en las redes sociales, en los blogs y en todas las demás formas de comunicación que nos ofrece la internet. Son otros lo que toman la bandera e informan, comentan, debaten y hasta se pelean por los colores, por el estilo, por los triunfos, por las derrotas, por el honor o por cualquiera de esas cosas que el fútbol trae consigo y nos enseña a valorar. Yo los sigo, los leo, los felicito y les agradezco. A todos.

Sépase, en todo caso, que desde mi rincón en la tribuna de Santa Laura, soy de los que cree que lo mejor que le pudo pasar a Unión Española en los últimos años fue la llegada del "Coto" (que ojalá se extienda por mucho tiempo más).

No digo que no difiera de algunas de sus decisiones, no digo que me guste todo lo que hace o todo lo que pone en la cancha. Digo que la propuesta de buen fútbol va mucho más allá de los errores o las omisiones. Y, por último, con todo y críticas, el equipo ha estado en estos años mucho más cerca de la gloria que del infierno. Y eso no es poco.

Debo estar cada día más tonto con esto de los años, pero confieso que a esta altura de la vida me interesan menos las copas y me importa más que el camino que nos lleve a ellas sea digno de orgullo, por más largo que resulte. Quizás sólo me felicite por eso el barón Pierre de Cubertin, pero qué se le va a hacer...