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lunes, 19 de julio de 2010

No hemos avanzado nada


Han ocurrido tantas cosas en estas últimas semanas y Unión Española, al menos este año, tiene esa extraña virtud de hacerte sentir que nada ha cambiado. Pasó el Mundial (con Chile saliendo airoso, con España campeón, con haaaarto fútbol), se despidió el gran José Luis Sierra (en una noche de congelador), llegó un nuevo gerente (Johnny Ashwell), falleció otro de los históricos hispanos (Hernán Fernández), se movió el mercado de pases (con hasta ahora dos novedades en Unión), hubo inter-temporada, Santa Laura siguió maquillándose, se anunció la visita del Real Zaragoza y luego se bajó; en fin, ha corrido mucho agua bajo todos los puentes imaginables, pero nuestro equipo parece no haberse movido un milímetro del sitio en que nos quedamos cuando se decretó el receso del campeonato.

No pude ir a Santa Laura el viernes, pero leo los comentarios y veo las imágenes y no puedo más que convencerme que Unión Española no ha mejorado nada en las últimas semanas. La realidad me convence de que, tras varias semanas de trabajo y preparación, tras varios amistosos y mucho “repaso” del esquema táctico, el equipo sigue atornillado al juego deslucido, mezquino, a la falta de ambición, a la especulación con el resultado, al malentendido pragmatismo. Si no, no me explico que Unión abra la cuenta contra San Felipe y luego eche la micro atrás, hasta que le empatan y luego le dan vuelta el partido. No me explico la falta de gol si no es por un esquema que piensa más en el arco propio que en el contrario. No me explico que tengamos tantos empates si no es por un planteamiento que apuesta, por sobre todo, a no perder.

¿Cuánto podemos esperar de nuestros nuevos refuerzos? ¿Cuánto debemos esperanzarnos en la recuperación del nivel de algunos de nuestros referentes en el equipo? ¿Cuánto más habrá que esperar para que las incorporaciones de inicios de año realmente muestren que valían la pena? La verdad, no sé qué pensar a estas alturas del año. Luis Pedro Figueroa y Kevin Harbottle suenan bien, pero ¿le cambiarán la cara al equipo o se los tragará la niebla de esta campaña 2010?

¿Es que acaso no habrá nada que salve este 2010 de mierda (y ya no hablo sólo de fútbol)?

2 comentarios:

zeppelin dijo...

Hola viejo.
Es bueno que estés de vuelta.

Comparto contigo en todo, casi todo. Y me parece un excelente análisis que debería servir para que Segovia, Ashwell, Sierra y Cia. den comienzo a la reconstrucción. Una vez más. Y tratando de apuntarle al técnico. ¡que mala suerte hemos tenido con los cuerpos técnicos! Espina, Garcés, LHC (que lo despedimos los termocéfalos) y ahora esto, ufff.

Te agrego dos cosas.
1. El nivel de los refuerzos del año ha sido paupérrimo. Sólo escapa a este descarnado comentario, Espinoza. De lo mejor, pero sin ser brillante.

2. El plantel que quedó del 2009 es de muy dudosa categoría. Nuestros laterales dan pena, el mediocampo no existe y el mejor del ataque fue Núñez. Sí, creelo.

Cuanto extrañamos a Estévez, Canales, Ramírez, ese león que era Villagra y con el complemento perfecto de Leal.

Si ganamos la Copa Chile sería un milagro para como estamos jugando y probablemente nos nublaría la vista ante el triste espectáculo que vemos. Pero las copas y las estrellas también sirven. Estoy indeciso.

Ojalá que termine rápido este año. Que Segovia no se aburra. Que Altamirano, Bustos, Gattas, Hidalgo y otros jóvenes tengan oportunidades. Que ganemos la Copa Chile y clasifiquemos a alguna copa internacional. Que Israel renuncie, con Copa o sin ella. Que Santa laura esté cada vez más hermoso. Y que ojalá por lo menos en un solo partido juguemos lindo. ¿Es mucho pedir?

Saludos
Desde Temuco

PD: hay otra cosa que no cambia. Unión le acaba de ganar por penales a Católica en ese campeonato de pacotilla del FUTSAL. No puede ser todo malo. Tengamos fe.

Anónimo dijo...

post impresionante. Realmente disfruté la lectura de su blog.

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