Fueron unas vacaciones intensas y llenas de fútbol. Por TV, en Santa Laura o por radio me harté de "jugo de pelota". Bueno, "me harté" es sólo una expresión, porque la verdad nunca podré saciarme de fútbol y menos de Unión Española.
Pero ha llegado la hora de volver al trabajo, de comenzar un nuevo y largo año de labores que espero se vaya adornando semana a semana con triunfos hispanos, con visitas a un Santa Laura cada vez más hermoso y concurrido, con pasión futbolera.
El próximo domingo, en nuestra visita al mundialista de La Florida, estaré jugando los descuentos de este febrero reconfortante, así que habrá que aprovecharlos a concho. De ahí en adelante, las dosis de fútbol vendrán con cuentagotas, a contrapelo del trabajo y las demás cosas "serias" que nos van agobiando durante el año.
Así que aquí vamos otra vez, como quijotes, como Sísifo, a enfrentar el retorno menos ansiado.
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